Un dilema que siempre surge es ¿cuándo estás reinventando la rueda y cuándo estás consiguiendo encontrar el producto que mejore a la especie humana? 

¿Es cuestión de creerse más inteligente que el resto hacer poner un ladrillo en el acelerador de tu máquina industrial para no poner tu pie? Se trata de una medida de seguridad que alguien decidió que era buena idea que estuviera. Es quizás por esto por lo que muchos intentos de emprendedores hacen estupideces que acaban estando en la lista de los Premios Darwin, como aquel que decidió poner un cohete enganchado en su coche y salió volando hasta morir. Son ejemplos de falta de consideración antes de inventar las cosas.