Emprender paso a paso
El diseño danés que pone la moda para hombres en el mapa de Europa de la mano de Mikkel Andersen y Sebastian Petersen
Publicado el lunes, 20 de febrero de 2017 a las 18:46
Acabar los estudios supone una gran apertura de puertas, muchas de ellas en el mundo laboral. Pero decidir a lo que uno quiere dedicar su tiempo con tan solo 18, 20 años no es nada fácil. Pero siempre está la excepción que confirma la regla, o mejor dicho excepciones. Mikkel Andersen y Sebastian Petersen, en 2007, tras acabar el instituto con apenas un pie en el mundo universitario decidieron abandonar sus estudios y entrar por la puerta grande al mundo laboral.
Bueno puerta grande, lo que se dice grande... A lo mejor a vista de otros, pero desde la propia experiencia no fue nada fácil.
Fundar Trendhim fue difícil, según Mikkel - “Si alguien nos hubiera advertido de que tendríamos que trabajar 16 horas al día los 7 días de la semana, invertir en torno a 14.000 euros y abandonar la mayoría de nuestras vidas sociales durante 2 años, nuestras expectativas acerca de iniciar un negocio hubieran sido diferentes. Pero cuando se tiene espíritu energético y aventurero, no hay nada que lo detenga.”
Se podría decir que el truco está en la constancia y la confianza en uno mismo. Como ya todos sabemos, Roma no se construyó en un día, y una empresa no iba a ser menos. Los primeros pasos de Trendhim fueron en un apartamento de 83 m2, donde se llevaba a cabo el almacenamiento, la producción, la oficina y la vida diaria de estos jóvenes emprendedores. De 83 m2 pasaron a un chalet, y del chalet a un señor almacén de 200m2.
El crecimiento en territorio fue consecuencia de la incorporación de nuevas categorías y la expansión a otros países. No es lo mismo tener 5 categorías que 19, y no es lo mismo convivir con 20 tipos de corbatas y pajaritas que con 100 tipos de cada.
Como consecuencia de esto, seis años más tarde, Tendhim se vio obligado a ampliar la plantilla, y fue ahí cuando los días de solteros durmiendo en el colchón del salón, habían terminado.
Tal fue el crecimiento que en el séptimo año se extendieron por 14 de las principales potencias europeas.
Pero una empresa pasa lo mismo que con las plantas. No basta con crearla, necesita mantenimiento. Y para un buen mantenimiento la clave es la constancia y la innovación. Y en un mundo tan competitivo como es la moda, nunca puedes quitar ojo.
Ahora bien, pensemos una cosa. Si su empresa quiere entrar en el mercado alemán, sin duda, una de las mayores ventajas es el conocimiento de alemán y de la cultura alemana. Y quien conoce mejor el idioma y la cultura alemana que un propio alemán. Pero, ¿y si no es solo Alemania? ¿Qué se puede hacer para expandirse por 14 mercados europeos si no se tienen las habilidades lingüísticas para adecuarse y ajustarse a las exigencias de dichos mercados?
Muy fácil. Estudiantes como Country marketing managers. El pasado octubre Trendhim contrato a 11 estudiantes de la Universidad Local (VIA University) para llevar a cabo la comercialización por las diferentes potencias europeas.
“Hemos aprendido que sobrevivir en este mercado requiere optimizar continuamente la página web y el marketing es la clave del éxito. “- Establece Martin Højbjerg Christiansen.
Gracias a estos estudiantes Trendhim ha sido capaz de incorporar las traducciones necesarias a su página, y dejar de lado el traductor, que muchas veces puede jugar malas pasadas.
Así, Trendhim ha resuelto el desafío con su nuevo departamento de Marketing internacional. Con tan buenos resultados que nueve estudiantes adicionales se unen a la plantilla.
Sara Lopez Alaguero, estudiante de ICT Engineering en VIA y responsable de Trendhim en España explica:
“Es muy difícil conseguir un trabajo en España, y casi imposible encontrar un trabajo que no esté relacionado con la carrera que estudias. Piden gente joven, con más de 10 años de experiencia. Cuando llegue a Dinamarca jamás me imagine que iba a encontrar un trabajo como este, y mucho menos que iba a ser la responsable del mercado de todo un país. Sin duda puedo decir que la suerte llamo a mi puerta cuando encontré este trabajo.”
Es ahora Mikkel y Sebastian, echando la vista atrás se dan cuenta de que el esfuerzo invertido, madrugar y trasnochar día sí y día también ha merecido la pena.
Todo se basa en la constancia, si tienes una idea clara, ve a por ella. No importa si te equivocas o no, lo importante es intentarlo. Si sale mal, algo habrás aprendido, ya que no hay mejor maestro, que la propia experiencia.