Encuentra tu toga de abogado para acudir a audiencias

Desempeñarse profesionalmente en un área muchas veces requiere más que tener el grado y las habilidades, supone, asimismo, viajar o usar cierta indumentaria para poder ejercer correctamente. Desde las profesiones más formales hasta los oficios más simples establecen el uso de una vestimenta específica o un uniforme, ya sea por protección o por presencia. Este es el caso del Derecho y de su práctica en la abogacía, en la que saber dónde obtener esas prendas es necesario.

Es bien conocido que la buena presentación y el atuendo formal son indispensables para presentarse ante los tribunales o, incluso, asesorar clientes mientras se está en el bufete. Si se trata de un abogado, los pantalones de traje, la camisa y los zapatos de vestir, la corbata y el saco son requisitos para ingresar en audiencias. Si se trata de una abogada, los pantalones de vestir o falda hasta la rodilla, la blusa de tela formal, saco y zapatos altos son necesarios para ejercer.

La etiqueta mencionada está asociada a las formalidades del Derecho, además sugiere seriedad en el tratamiento de la situación tomada como caso. Esta percepción genera seguridad y coadyuva a conectar mejor con el cliente, la audiencia y el jurado. Pero la abogacía supone otras incorporaciones, ya sea como defensor o como juez, especialmente en este cargo.

Formalidad de vestimenta por ley

Entre ellas se encuentran las togas, establecidas en el artículo 187 de la Ley Orgánica del Poder Judicial que dispone:

1. En audiencia pública, reuniones del Tribunal y actos solemnes judiciales, los Jueces, Magistrados, Fiscales, Secretarios, Abogados y Procuradores usarán toga y, en su caso, placa y medalla de acuerdo con su rango.

Asimismo, en el Estatuto General de la Abogacía Española, el artículo 37 se refiere a la adecuación de la vestimenta de acuerdo a la dignidad de la toga:

1. Los abogados comparecerán ante los Tribunales vistiendo toga y, potestativamente, birrete, sin distintivo de ninguna clase, salvo el colegial, y adecuarán su indumentaria a la dignidad y prestigio de la toga que visten y al respeto a la Justicia.

El uso fue instaurado en el gobierno de Felipe II para agregar solemnidad al trabajo en funciones y no solo a las celebraciones, pues se acostumbraba usarla. La toga siempre ha sido negra aportando más sobriedad y elegancia a la vestimenta.

Sin ocupar demasiado tiempo, puedes encontrar en este espacio las mejores togas para abogados para comenzar a ejercer o renovar la antigua que ya tenías. Su forma es de sobretodo y deja ver tanto las mangas de la camisa como la parte frontal y la del cuello. Por lo que, a pesar de que te pongas algo encima, tienes que cuidar la combinación de colores. Este producto trae su funda para que te sea más fácil guardar la indumentaria. Con este elemento adicional, se reducirán las posibilidades de que estando guardada acumule polvo u otros agentes dañinos.